Cómo lavar la manta de lana de alpaca: 4 pasos fundamentales

Saber lavar una manta de lana de alpaca es fácil, y si no nos cree, aquí tiene todos los consejos, ¡simplificados en cuatro pasos! En general, lavar una manta de lana de alpaca es tan rápido como remojarla en agua, agregar el detergente, enjuagar y secar. Sin embargo, también agregamos algunas instrucciones de cuidado para los productos de alpaca al final de este artículo.

¿Debería usar una lavadora? Algunas mantas de alpaca permite la lavadora, pero debes comprobar la etiqueta de antemano. No se preocupe porque no dañará accidentalmente su manta porque discutiremos lo que se debe y no se debe hacer para los productos de alpaca a continuación:

¿Cómo se lavan las mantas de lana de alpaca?

Paso 1. Remoje la manta en agua tibia o fría

El secreto para dominar cómo lavar una manta de lana de alpaca es sumergirla en agua tibia o fría. Agrega un poco de detergente suave al agua y remoja la manta durante media hora. No es necesario que cepille o frote la manta en este paso porque solo está permitiendo que el agua jabonosa penetre en las fibras y evite que las manchas se asienten más profundamente.

El punto crítico a recordar en este paso es nunca usar agua caliente o limpiadores fuertes. De lo contrario, corre el riesgo de arruinar la fibra de alpaca. Además, solo remoje la manta después de haber disuelto completamente el detergente.

Paso 2. Enjuague la manta con agua corriente

Una vez que hayas terminado de remojar, es hora de enjuagar la manta de lana de alpaca. Tenga en cuenta que nunca frotó ni cepilló la lana porque puede dañar la integridad de las fibras. En este punto, se asegurará de que no haya residuos de jabón en la manta de lana de alpaca.

Saque la manta del agua y enjuáguela con agua corriente. Nuevamente, use agua tibia o fría porque el calor daña la lana de alpaca. Repita el enjuague de la manta hasta que no quede espuma, pero nunca la retuerza ni la retuerza porque el material es demasiado delicado.

Paso 3. Elimine el exceso de agua

Apriete la manta tan suavemente como pueda en lugar de escurrirla para eliminar el exceso de agua antes de secarla. El agua puede hacer que la manta se vuelva pesada, lo que puede deformar el material. Por lo tanto, apriete suavemente en la etapa final del enjuague.

Una vez que la manta esté libre de agua y jabón, puede colocarla entre dos toallas para absorber más la humedad. También puede enrollar el sándwich de manta para sacar el agua repetidamente. Sin embargo, tenga cuidado de estirar la manta porque puede arruinar la forma.

Paso 4. Seque la manta de lana de alpaca

Finalmente, proceda a extender la manta y déjela secar al aire. A diferencia de otras mantas, no se recomienda colgar una manta de lana de alpaca porque el peso de la humedad puede hacerla caer y cambiar su forma. Otro factor a evitar es secar la manta con calor directo de la luz solar o cualquier fuente de calor.

Elija un área con buena ventilación para asegurarse de que la manta se seque completamente. Puede tardar un día entero en secarse, dependiendo del tamaño de la manta de lana de alpaca. Solo reutilízala una vez que ya no esté húmeda.

¿Puedes lavar a máquina lana de alpaca?

Si desea saber si puede lavar a máquina la lana de alpaca, debe verificar la etiqueta de la manta. Algunas mantas permiten el uso de una lavadora, mientras que otras prefieren lavarse las manos porque es más suave y seguro. Aquí hay algunas pautas para las mantas de lana de alpaca que se pueden lavar a máquina para evitar que se dañen debido a la agitación:

  1. Configura la lavadora a temperatura fría y usa el ajuste delicado
  2. Desactive la velocidad de centrifugado porque puede arruinar las fibras
  3. Use el detergente o limpiadores suaves recomendados para evitar la decoloración y la caída
  4. Dale nueva forma a la manta después del lavado para que no se arrugue en seco

¿Se encoge la lana de alpaca?

La lana de alpaca tiende a encogerse, especialmente si se agita por la ficción o se expone a altas temperaturas. Las fibras pueden incluso perder su forma y sentirse más parecidas a las de un fieltro. El uso de limpiadores fuertes también puede hacer que la lana se mate y se haga nudos.

Asegúrese de seguir nuestras pautas de lavado y las instrucciones de cuidado en la etiqueta de su manta. Y después del lavado, cepille ligeramente la lana de alpaca para ayudar a restaurar su esponjosidad. Estos consejos también son aplicables a otros materiales propensos a encogerse .

Cómo secar la manta de alpaca

Nunca uses una secadora sobre una manta de alpaca. El calor puede hacer que la manta se encoja o deforme. La mejor manera de secar una manta de alpaca es secarla al aire y luego cepillar la superficie suavemente.

Consejos adicionales sobre cómo cuidar las mantas de lana de alpaca

  1. La lana de alpaca requiere limpieza con menos frecuencia porque las fibras no absorben los olores rápidamente
  2. La lana de alpaca tiene un exterior brillante en forma de escamas que ayuda a repeler el líquido, por lo que no es necesario restregarlo durante el lavado
  3. La mejor manera de mantener su manta de lana de alpaca es aireándola afuera para refrescarla y desodorizarla

Conclusión

La lana de alpaca es uno de los mejores materiales de bajo mantenimiento. Sin embargo, aún debe saber cómo lavar la manta de lana de alpaca correctamente para evitar arruinar la forma y textura de la manta. En resumen, lavarse las manos es el método más seguro y evitar la secadora puede evitar que se encoja.

Además, evite los detergentes fuertes y las altas temperaturas. Solo tenga en cuenta estos consejos, y su manta de alpaca debería durar mucho tiempo. Si tiene más información sobre el cuidado de la lana de alpaca, ¡comparta algunos a continuación!